El desarrollo de nuestro alumnado es un proceso continuo y ascendente, que ocurre como resultado de la educación: los logros que se producen en una etapa tienen repercusiones para la siguiente y serán la base de otros aprendizajes posteriores.
Es por ello que el paso de una etapa a otra debe ser continuo, gradual y coherente evitando cambios bruscos y saltos en el vacío, para ellos desde nuestro Centro planteamos una serie de actuaciones que se encuentran incluidas en nuestro programa de tránsito.
En estas actividades de tránsito ha primado el trabajo colaborativo entre ambas etapas, han tenido como objetivo favorecer que el alumnado de infantil se familiarice con el espacio, tipo de actividades, horario y los materiales que se utilizan en el nuevo nivel educativo que van a comenzar.